lunes, 15 de septiembre de 2008

División y confrontación

Es bien sabido que el argumento principal de los partidos españolistas para oponerse a cualquier avance en el autogobierno de la C.A.V. es que divide. Se refieren, más exactamente, a que divide a la sociedad entre los nacionalistas y no nacionalistas, lo que mejor explicado es: los nacionalistas vascos y los nacionalistas españoles. En otras palabras, los que están a favor y en contra de conseguir la independencia de Euzkadi. Opción legítima de todo pueblo. Aunque yo creo que a lo que se refieren es a la confrontación de dos ideologías como si fueran a desembocar en una guerra civil. Si no, no me lo explico de ninguna manera. ¿Cómo van a tener miedo a la división?

La libertad de expresión y de pensamiento, exige al pueblo la obligación de respetar al que no opina de igual manera. Lo cual quiere decir, desde otro enfoque, que no todos vemos las cosas de la misma manera y eso es que hay división de opiniones. En una sociedad heterogénea, como se pretende esta, democrática y liberal la división es una obligación. Una sociedad homogénea es una sociedad totalitaria donde todos los ciudadanos deben pensar de una manera concreta y entender la vida desde un prisma gubernamental. Una sociedad como la de 1984 o la de Un mundo feliz de Houxley. ¿Acaso queremos una sociedad adormecida y uniforme? Parece que algunos sí, quieren una sociedad uniformemente española.

Aun así, creo que Zapatero y compañía confunden división con confrontación. Piensan que si se convoca una consulta habrá una confrontación entre nacionalistas vascos y españoles. Yo, personalmente, no lo creo. No la hubo con Basta Ya y cía, cuando el Gobierno Español provocaba sin parar, y no la habrá ahora. Los vascos somos mucho más pacíficos y los nacionalistas vascos más. Porque llevamos aguantando muchos años de imposición, intentando ayudar al equilibrio del Estado en general para que nos lo agradezcan con migajas. En la República quedó claro con el Estatuto de Lizarra y ahora queda claro con la Consulta de Ibarretxe. Con los españolistas no hay nada que hacer. Con ellos, sólo se puede conseguir algo cuando están contra las cuerdas, eso son pactos concretos, pero jamás se puede comprometer uno a algo porque tarde o temprano te dejarán tirado. Porque si hay algo que une al PP y al PSOE es que antes que demócratas de izquierdas o derechas son españolistas viscerales. Además, sus franquicias en Euzkadi no son más que eso. El interés del partido en Madrid está por encima de las necesidades y decisiones del partido en otros lugares. Así nos encontramos con discursos contradictorios y ponencias vergonzosas que pregonan un apego a lo local pero que implican una subordinación a lo estatal o intromisiones como en Navarra. No es fácil ser socialista vasco/ navarro cuando sabes que no importas una porra en Madrid, pero tampoco es bonito no pegar un golpe en la mesa como los catalanes. Será cuestión de cobardía o de que, en realidad, sus giros vasquistas no son más que pura imagen. Porque si los socialistas vizcaínos han sido algo: es antinacionalistas vascos y españolistas. Desde siempre.

Pero eso ya lo sabíamos. Pero lo que más rabia me da es su tono prepotente. Cada vez que oigo a Zapatero o De la Vega hablando de esta manera de las necesidades del Pueblo Vasco me pregunto que si no quieren dividirnos, ¿por qué se presentan a las elecciones? Que tomen ejemplo antes de pedirlo a los demás.

PD: He aquí lo que dice la RAE sobre estas palabrejas mágicas

División: http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=division
Confrontación: http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=confrontacion

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