miércoles, 30 de julio de 2008

Las mujeres y la belleza

Siempre se dice que las mujeres son complicadas y los hombres sencillos. Parece que nosotros no nos cuidamos nada pero ellas, en cambio, se pasan el día dando vueltas a su imagen para estar lo más guapas posibles. Es una convención social, las mujeres deben estar guapas para los hombres y eso muchas veces les obsesiona. Hasta hace bien poco, las mujeres sólo se interesaban en pescar marido y aunque muchas sigan en esa tónica, otras piensan en su desarrollo personal. Quieren vivir sus propias vidas, sin ataduras, y ser libres. Aun así, la imagen sigue siendo básica para ellas. Es la herencia del pasado.

Para los hombres hay una imagen común: la de la tía buena o ejemplo a seguir. No es que sea una imagen muy nítida, ya que cada uno tiene sus gustos, pero tiene puntos en común como la delgadez y la belleza facial. Otros atributos como los pechos pueden ser discutibles, pero las dos características anteriores no. Una tía buena debe ser guapa, sin exceso, y delgada. No obstante, la inteligencia no tiene peso. Es lógico porque estamos hablando de tías buenas y no de mujeres inteligentes. Lo que no es tan lógico es que las tías buenas tengan más aceptación que las mujeres inteligentes, bien que estos dos tipos de mujeres pueden ser complementarios. Una mujer puede ser bella e inteligente a la vez, aunque la primera tenga más peso que la segunda. Un problema que tiene nuestra sociedad es su superficialidad. Por eso, es corriente que las mujeres bellas sean antes aceptadas. Pero no todos los hombres son así. Hay muchos varones que no tratan a las mujeres como objetos, sino como personas. Esos varones suelen ser del prototipo que no se come un rosco. Muchas veces he pensado que el mayor error que hemos tenido muchos ha sido tratar a las mujeres como personas y no objetos. Me explico: pensaba con el pito. Aunque es cierto que los mejor vistos por las mujeres son los más atractivos. Porque las mujeres son igual de superficiales que los hombres. Además, son mucho más selectivas. Mientras que al hombre no le importa mucho la mujer, a la mujer sí que le importa el hombre y lo utilizan como objeto para su propio provecho. Es la sociedad de la imagen.

Este delirio superfluo lo sufren más las mujeres que los hombres. Como bien se ha expuesto antes: la mujer está más preocupada por la imagen que el hombre. Gran parte de su felicidad depende de ella. Así es que la mayor parte de trastornos que tienen algo que ver con el físico lo padecen las mujeres. En parte es normal, porque ellas dependen más de su físico y ven en él su arma más poderosa. Al mismo tiempo, su imagen de sí mismas tiene mucho que ver con su autoestima. Una mujer que se ve guapa es una mujer con la autoestima alta, en cambio, una mujer que se ve fea es una mujer con la autoestima por los suelos. Por no hablar de las mujeres que se ven gordas y no desean más que adelgazar para convertirse en una tía buena más. Estas mujeres sufren mucho y llegan hasta a dejar de comer o vomitar lo ingerido para conseguir bajar el peso y la talla. Además, cambian su personalidad. Es su culpa, pero también la nuestra por exigirlas ser perfectas. Somos cómplices de sus trastornos. Inconscientemente, les exigimos que se ajusten a los cánones de la tía buena y les rechazamos por no llegar. Al igual que ellas que nos exigen ser tíos buenos y los que no llegamos nos quedamos como mejores amigos. Menos mal que yo he tenido suerte.

¿Mejoraremos la pasada temporada?

Esa pregunta ronda la cabeza de muchos seguidores del Athletic. Después de los dos nefastos años anteriores, la temporada pasada se solventó más tranquilamente. Hasta se pudo ir a Europa. Si no llega a ser por el conservadurismo de los jugadores y el cuerpo técnico, ahora mismo podríamos estar en UEFA tras pasar por la Intertoto. Aunque es verdad que quizás no era conveniente para una plantilla con futuro. Si hay que hacer balance de la temporada pasada, podemos hablar del lastre de las anteriores pero sobre todo, de una nueva generación de leones. Jugadores como Amorebieta, Javi Martínez y Llorente (por fin!) han demostrado que pueden ser decisivos en los próximos años, así como Markel Susaeta y Koikili que vinieron desde el filial. El de Otxandio era una duda ya que venía con 26 años pero supo quitar el puesto a Asier Del Horno, el gran fichaje del año pasado que junto con David López fueron la decepción de la pasada temporada. El riojano no supo rendir como en Pamplona y acabó en la banqueta.

Pero fue la incorporación de Joaquín Caparros la más importante. El técnico utrerano ha convertido al Athletic en un equipo rudo y duro en defensa. Esa transformación era casi impensable unos meses antes. Pena que tardase tanto tiempo en encontrar una formula para marcar goles. Llorente despertó tarde, pero su rendimiento aportó mucho en la Segunda Vuelta. Aun así, no todo fue positivo. La lesión de Gorka o el comportamiento de jugadores como Yeste, Zubiaurre o Del Horno empañaron una buena temporada que empezó de manera mediocre.

Dijeron que la temporada pasada fue la de la de transición. Este año ponen como objetivo Europa. No estoy muy seguro de que ese sea el objetivo. Pienso que con la plantilla que tenemos primero tenemos que salvar los muebles para poder mirar más arriba. Hay que seguir creciendo poco a poco y desarrollando esos jóvenes valores que tenemos.

martes, 29 de julio de 2008

La tentación está ahí

Los esfuerzos piden mucho sufrimiento: dejar cosas de un lado y elegir otras. Saber qué quieres hacer cuando tantas son las posibilidades, y muchas son apetecibles, es complicado. Escoger qué te conviene y qué no, reflexionarlo y ponerlo en práctica no es tan sencillo como parece. No obstante, hay que tener prioridades: saber qué viene mejor y saca más rendimiento al bienestar propio. Muchas veces hay que vencer a la tentación porque la tentación está ahí.

La tentación es aquello que deseas hacer, que te seduce. Te atrae aunque muchas veces sea perjudicial para ti. Las drogas son un ejemplo claro. En muchos años no hemos avanzado: seguimos cayendo en la tentación, es nuestro sino. Puede ser nuestra destrucción. Caer en la tentación es no saber priorizar. Muchas veces, es elegir el placer más vertiginoso sin pensar en las consecuencias. Luego, llegan los lamentos. Aun así, de los errores se aprende.

No caer en la tentación es renunciar a muchos placeres instantáneos y convenciones sociales. Es tener paciencia y visión de futuro. Lo inmediato no tiene siempre porque ser lo mejor. A veces la espera merece la pena. Más vale perder un minuto en la vida que la vida en un minuto.

lunes, 28 de julio de 2008

Los ciclos de la vida

Muchos teorizan sobre los ciclos de la vida. Cosas que ocurren en un cierto momento y tiempo después ocurren de nuevo. Aunque no sea un gran entendido del tema siempre he pensado que las cosas se repiten: ya sean los sentimientos, las sensaciones, los deseos y los sueños. No quiero decir que se repitan de la misma manera, con la misma intensidad, sino que reaparecen y se complementan con otras cosas nuevas.

Últimamente me pasa eso: muchas cosas que habían desaparecido, han vuelto. Seguramente luego se irán. Puedo hablar de personas con las que perdí el contacto y lo he vuelto a recuperar o puedo hablar de ciertos gustos o intereses. Por ejemplo, estoy volviendo a escuchar a Bob Marley. Cuando tenía 12 años, rebuscando entre discos de mi Aita, encontré un disco suyo que me gustó tanto que me compré el recopilatorio “One Love” que salió aquel año: fue mi primer disco. Recuerdo que lo compré al volver de Finlandia. Fue mi recuerdo de aquellas tierras. Me gustó tanto que otro amigo mío lo compró después. Ahora, tras años en los que nuestra relación se había delimitado al terreno escolar y deportivo, salimos juntos de fiesta.

Un tiempo después dejé de escuchar aquel disco y hasta ahora. Eran otros tiempos, todos hemos cambiado. Hemos crecido, madurado y evolucionado, pero esas partes de mi vida han vuelto. “Iron Lion Zion” me sigue emocionando.

jueves, 24 de julio de 2008

Detenciones y demás

Ayer en Bizkaia o Vizcaya, como mejor les parezca, y alrededores; se volvió a desarticular (por enésima vez) el “Comando Bizkaia”. Este nombre ha sido dado por la policía ya que se sabe, nunca a ciencia cierta, que actuaron tanto en Bizkaia como fuera de ahí. Entre los detenidos, la mayoría sin fichar y alguno que otro de vacaciones (así como lo leen), estaba el miembro “liberado” (que sólo trabaja para la organización) Arkaitz Goikoetxea que según fuentes policiales ha estado metido en todos los fregados. Multiusos y comprensivo: aparte de colocar la bomba en su lugar y accionarla, se acercaba a llamar por teléfono para avisar a las autoridades locales . La policía le reconoció por su acento causado por una malformación en la boca. El otro que estaba metido en los fregados, Jurdan Martitegi, sigue aún en paradero desconocido. Vamos, que no le han cazado. Por si fuera poco, en la documentación incautada a uno de los detenidos un comando de E.T.A. iba a actuar inminentemente en Getxo. No nos cuenta noticias frescas ya que todos sabemos que si algo hace E.T.A. es atentar.

Aun así, lo que más me preocupa es la actitud política. Curiosamente estas detenciones vienen precedidas de varios atentados de E.T.A. en la costa cantabra y coinciden con una época de crisis y que la victoria de la selección española de fútbol quede lejos. Como no creo en las casualidades ni que los Guardias Civiles se hayan encontrado a Arkaitz Goikoetxea de katxis por Iturribide, es probable que las detenciones tengan que ver con la imagen del Gobierno Español. Ya se intentó desviar la atención con la noticia de que E.T.A. había declarado una mini-tregua a Ibarretxe mientras se debatía su plan, pero no se consiguió y se fue a por el enemigo popular: E.T.A.. No es la primera vez que esto ocurre, es un recurso muy repetido por los sucesivos gobiernos españoles, si bien lo de Zapatero llega al ridículo. Suponiendo que E.T.A. está más débil que nunca, este año los cuerpos de seguridad del Estado llevan 196 detenciones de “peligrosos etarras” a punto de entrar en acción. Todo esto en un clima de crispación y problemas sociales y económicos. Aun así, a alguno se le ha debido atragantar el champán al ver que muchos de los detenidos quedaba en libertad sin cargos o con fianza (http://www.gara.net/gaiak/atxiloketak/). Pero por si acaso, los miembros del Gobierno se pusieron la chapita y los soltaron la chapa tapando estos desastres. Los votos son los votos y en Euzkadi somos pocos y aunque estemos hartos de atentados siempre quedará el Plan Ibarretxe para desviar la atención. En fin, ya veremos a cuantos de los miembros del “Comando Bizkaia” sueltan: ¡Que Dios nos proteja!

domingo, 20 de julio de 2008

Todo está muy lejos.

Cuando vamos creciendo vamos descubriendo que las cosas no están tan lejos como pensamos. De pequeños, vivimos “entre algodones” en un mundo falsamente perfecto. Hasta cierta edad no nos enfrentan con muchos problemas sociales como pueden ser las drogas, la violencia o el paro, a no ser de que se viva en primera o segunda persona. No obstante, es al pasar el tiempo que nos damos cuenta de que los problemas existentes en nuestra sociedad no son ajenos a nosotros. Descubrimos que el vecino está en el paro, que el tío de tal pega a su mujer o que el mejor amigo de tu madre está muerto por sobredosis. ¿A qué viene esto?

En estos últimos tiempos veo que muchos jóvenes no saben administrar su libertad. Repiten los errores de anteriores generaciones y los perpetúan. Hablan con miedo de las drogas para unos años después consumirlas. Es quizás ese ámbito el más complejo. ¿Cuántas veces hemos visto fumar a algún anti-tabaco declarado? Pero lo más grave no es el que fuma tabaco, sino el que toma otro tipo de drogas. Hoy en día, están en auge las pastillas y la cocaína. Son drogas bastante peligrosas y perjudiciales para nuestra salud como para nuestro entorno, pero sobre todo: bastante serias. Por no hablar de beber alcohol en exceso y de mala calidad. Ya no se disfruta el alcohol: se consume. A veces parece que no hemos aprendido de las cirrosis o el barrido que hizo la heroína en Euzkadi. Puede que nuestros hijos recuerden a los que el cannabis o la cocaína barrió. Puede que ellos sean barridos por las pastillas o vete a saber qué.

Aun así, lo peor que nos puede ocurrir en esta época de paz y prosperidad, donde no tenemos que luchar por la supervivencia como hicieron nuestros antepasados, es saber conservar nuestro nivel de bienestar y no suicidarnos con drogas y estupideces por falta de responsabilidad. No concebimos que somos los responsables de nuestros actos ni que estos tendrán eco en el futuro. Pensamos que todo está muy lejos.

miércoles, 16 de julio de 2008

La falta de imaginación

Hoy en día que todo es tan accesible y tan cercano que no hay más que apretar un botón. Además, todo acontecimiento es histórico, fantástico o apoteósico y los sentimientos florecen a toda hora en todo momento y, más aún, las emociones omnipresentes en los medios, que hacen que los sentimientos más íntimos resulten aburridos y repetitivos. Habitamos una sociedad de repetición donde la imaginación y la originalidad brillan por su ausencia. No hay más que encender el aparato de televisión y ver las versiones existentes de un mismo producto o lo que, mejor dicho es, las modificaciones o malas copias de ese producto. Podríamos hablar de las mil caras del “Chiqui- Chiqui” como también podríamos hacerlo de las imitaciones de la ropa o los adornos que nos colgamos para sentirnos más bellos. Pero quiero hablar de lo más íntimo, de nosotros mismos. En la sociedad actual, que nos lleva por unos derroteros de repetición e imitación, todos queremos ser lo que el vecino es. Eso es, tener su casa, su mujer y su trabajo o, en su defecto, su coche, su carisma o su sociabilidad. Bien es cierto que el humano siempre ha buscado modelos a imitar, pero lo de hoy en día es exagerado: cada personalidad tiene su imagen. Los humanos, sin ser obligatoriamente militantes, vestimos uniformados. Cada uno utiliza la imagen que más le conviene o le gusta, pero esa imagen erosiona su personalidad. Como ejemplo a poner: la chulería de los canis o el patriotismo de los borrokas. El humano asocia una actitud a una imagen. Esta asimilación puede traer consecuencias negativas como los prejuicios y las luchas entre bandas. Pero lo que a mí me interesa es la falta de imaginación.

Intuitivamente, siempre he pensado que el hombre no inventa nada, sino que lo descubre. Porque lo que hace el hombre es adaptarse a la realidad y no viceversa. Esa visión puede ser más que discutible, pero lo que es indiscutible es que la imaginación está a la baja. Como bien he dicho antes, no hay nada más que ver la televisión para darse cuenta. Pero quien dice televisión, que suele ser el centro de las críticas, dice radio o navegar por Internet. Todos los artes se están estancando. Es obvio. La música, el cine (los que más sigo y entiendo), la literatura y demás no hacen más que repetirse, no hay sabia nueva ni aire fresco. Todas las obras siguen un prototipo de guión o forma que, salvo honrosas excepciones, es predecible. ¿Quién no ha adivinado nunca el final de una película? ¿El ritmo de una canción? ¿La trama de un libro?

Esta falta de imaginación no sé a qué viene. No sé si es verdad que estamos en un parón artístico, está todo inventado o nos tragamos todo lo que nos venden. Hombre, está claro que la última hipótesis es del todo cierta. No hay más que analizar qué nos ponen en los medios de comunicación para darse cuenta que todo es “comercial”. Vamos, que busca el bolsillo y la rentabilidad antes que el desarrollo artístico o la innovación en el arte. Aun así, hay que reconocer que para el ciudadano medio, que no está curtido en mil batallas artísticas ni es un entendido especializado, el arte “cultureta”, el catalogado como bueno; le resulta aburrido. A mí me pasa también. Por eso creo que no hay una solución clara a este problema. No obstante, pienso que se puede hacer mucho más o por lo menos esforzarse en no repetir la misma fórmula hasta la saciedad. Deseo un poco de aire fresco.

viernes, 11 de julio de 2008

Manifiesto por la Lengua Común

Leo con suma atención que el castellano está en peligro. La segunda lengua más hablada en el mundo con entre 450 y 500 millones de hablantes puede desaparecer del mapa por culpa del euskera, catalán y gallego. Insólito. Por una vez en la vida David va a vencer a Goliat. Los pocos vascoparlantes van a conseguir borrar del mapa vasco al castellano, al igual que los que viven en Galicia y Cataluña. Algo parecido han intentado transmitir varios intelectuales cercanos a UPyD que denuncian que el castellano está siendo marginado de los planes educativos de ciertas comunidades autónomas. Me lo tomaría algo en serio, sino supiera quienes están detrás y que el euskera se habla menos que hace 15 años (dato que salió poco tiempo antes) a pesar de su mayor conocimiento, lo que significa que el vasco elige el castellano como herramienta de comunicación. Pero eso Savater y su tropa lo ignoran. Prefieren instrumentalizar una lengua y su uso con una ideología política aun sabiendo que eso no es cierto. Ciertamente Savater intenta equiparar a los constitucionalistas con el castellano y a los nacionalistas vascos con el euskera para luego, con una pirueta, alegar que como los nacionalistas vascos persiguen a los constitucionalistas; el euskera persigue al castellano. Pura demagogia. Más aún, cuando muchos constitucionalistas, como Basagoiti, intentan ridiculizar a muchos nacionalistas vascos porque no hablan euskera.

Esta actitud no es nueva en Savater y su grupo de intelectuales “orgánicos”. Tiene que ser muy complicado, ahora que el PP no está en el gobierno, salir en los medios cada dos por tres y recibir dinero por conferencias y premios varios cuando no hay ninguna fuente de ingresos. Por eso, acuden a atacar a los débiles. Porque si hay una lengua débil en Euskal Herria Sur, utilizando el término cultural, es el euskera que está ninguneado y hasta casi perseguido en Navarra. Con una ley que limita las zonas vascoparlantes, la enseñanza de esta lengua se ve limitada a centros privados en muchas merindades. Pero eso no vende y es más sencillo cobijarse al lado del árbol que más sombra da. Aunque lo más grave no es eso, sino que la mayoría de los firmantes no son bilingües. Dudo que Savater o Arteta hablen euskera, y si lo hablan, jamás les he oído defenderlo ni utilizarlo signo que representa su actitud hacia la lengua. Porque si hay algo que diferencia a los vasco-parlantes y a los castellano-parlantes es que los primeros tienen una mente bilingüe mientras que los otros son monolingües.

Así, pido a Savater y su tropa que modifiquen su manifiesto y hablen de “las lenguas españolas” para pedir que su enseñanza sea obligatoria en los Institutos de Cervantes y en la Casa Real. Porque si se supone que la Constitución une a todos los españoles, esta debería acoger en su seno a todas las lenguas por igual. Pero está claro que algunos no saben vivir sin molestar a los demás.

PD: No quiero olvidar a la señora Rosa Díez, que sin tener ni idea de euskera ha estado en el Gobierno Vasco sin ningún problema. ¡Hay que ser sinvergüenza!

jueves, 3 de julio de 2008

El espíritu de Ermua

Ayer se cumplieron 11 años del asesinato de Miguel Ángel Blanco y para recordarlo Antena 3 emitió una película que recordaba sus últimas horas, producida por El Mundo TV, y luego hubo un debate en el que tomaron parte, entre otros, Gustavo de Arístegui, Joseba Arregi, Isabel San Sebastián, Antxon Urrusolo y Melchor Miralles. Vamos, de lo más variopinto del nacionalismo español. Hablaron poco de Miguel Ángel pero mucho del PNV. Le culparon de todo lo que ha ocurrido en Euzkadi y Joseba Arregi, ex-miembro jeltzale, advirtió que tiene que “homologarse” democráticamente. San Sebastián habló de que el PNV y E.T.A. tienen el mismo objetivo y los demás siguieron por los mismos derroteros. O sea que como siempre quedó demostrado que el enemigo es el PNV y no E.T.A. y sacando a relucir el “Plan Ibarretxe” para mezclarlo con la violencia. Todo a destiempo y fuera de contexto.

Aun así, lo que más me sorprendió no fue aquello, sino la concepción que tienen del espíritu de Ermua. No sé qué es en realidad. Yo lo identifico como el rechazo de la sociedad a E.T.A., y cuando digo sociedad, digo de casi todos los polos que conforman esta sociedad. Porque cuando el secuestro de Miguel Ángel Blanco salió todo el mundo a la calle. Gente de todos los colores y todas las opciones y opiniones. No obstante, anoche me di cuenta de que debo estar equivocado. El espíritu de Ermua para Isabel San Sebastián y compañía, sus adalides; es el españolismo rancio y el monopolio del de dolor las victimas de E.T.A. para atacar y criminalizar al nacionalismo vasco en general. Asimismo, el espíritu de Ermua se ha convertido en una excusa para que muchos “periodistas” u “opinólogos”, con una profundidad de pensamiento no muy alejada del “topicazo” y la ignorancia, vivan de ello durante muchos años. Fíjense hasta que extremo ha llegado el espíritu de Ermua que el mismo ayuntamiento, cuyo alcalde formó parte del foro, ha pedido que quiten el nombre del pueblo. Porque el mayor error que pudo cometer aquellos que “sustentaron” el espíritu de Ermua fue monopolizar un sentimiento colectivo de repugnancia a la violencia de E.T.A.. No era raro escuchar a miembros destacados de este colectivo acusar a los que no pensaban de la misma forma que ellos de ser “amigos de E.T.A.”, aunque estos estuvieran amenazados por la banda y a pesar de que ellos mismos (los del foro) habían ido con una pistola en el cinto (Mario Onaindia). Porque si de algo estaba lleno El Foro de Ermua y Basta Ya, las dos organizaciones que capitalizaron la respuesta popular, era de exmilitantes de E.T.A. que, salvo algún que otro caso, jamás se habían arrepentido de haber tomado parte en la organización terrorista; y de excomunistas reconvertidos en vete a saber qué. Eso sí, todos demócratas de toda la vida y dando lecciones a los demás. Pero han caído por su propio peso. Once años después apenas se les oye en casi ningún medio de comunicación ni se les toma en serio salvo en círculos de la derecha extrema española. Basta Ya ha desaparecido y el Foro de Ermua va por ese camino. Se les acabó el chollo.

El espíritu de Ermua no ha desaparecido, se lo ha llevado el tiempo y la politización. Su identificación con unas ideas concretas, el españolismo incivilizado de derechas e intransigencia vengativa han hecho que la gente se alejase progresivamente de ese concepto. Se ha convertido en un circo mediático. No hay más que ver que lo decían los habitantes del pueblo vizcaíno. Aunque, bien es cierto, que la esencia de aquel espíritu está presente hoy en día en la sociedad vasca. El rechazo a E.T.A. es casi unánime en la sociedad vasca.

El Baratz

El bar Baratz de Bilbao es un antro acogedor. Oscuro, sucio y lleno de pintadas, es de los de toda la familia; nunca te sientes solo, ni deprimido. Ahí, los jóvenes bilbaínos, hijos de Iturribide, se agarran sus primeras melopeas y prueban sus primeros “pitis” con quince años recién cumplidos. El trato es cercano y el olor fétido es normal, tanto como el sonido de esa música que baila Belcebú en los infiernos. Los opacos baños, son las típicas cuevas donde nadie, en su sano juicio, se atrevería a dejar ahí ni lo peor de su intestino. Las mugrientas paredes están decoradas con pintadas como “Komando Romo” o una lista de nombres de los por ahí han pasado. Eso sin olvidar los resultones tangas a tres euros y los azarosos preservativos que se venden en los retretes. Pero el bar no sería lo mismo sin los camareros. Sin graduado escolar, aprovechan la mínima para tirar los tejos a cualquier clienta. No es extraño que estén en la barra dándose el lote con alguna menor, entre cervezas y eructos. Aun así, el Baratz tiene su encanto. Es un gran bar adonde ir a tomarse una cerveza con los amigos mientras discutes de cuestiones banales y existenciales. Es un oasis en el mundo del negocio hostelero vasco, que está infectado por locales de mala muerte llenos de ‘chuloputas’ y reggaetón.